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FLUJO VAGINAL

Sobre el sangrado vaginal después del sexo

El sangrado vaginal después del sexo se refiere al sangrado durante o después de tener relaciones sexuales, cuando no se está menstruando o no se espera menstruar. Este sangrado vaginal se desarrolla con mayor frecuencia en mujeres entre las edades de 20 y 40 años. Después de la menopausia, cualquier sangrado se considera anormal hasta que haya sido evaluado y diagnosticado por un especialista.

El cuello del útero (extremo angosto e inferior del útero) suele ser la fuente del sangrado vaginal después del coito. Si se produce suficiente fricción durante las relaciones sexuales puede ocurrir un sangrado, sin importar que el cuello uterino esté completamente sano. Pero esta no es la única causa, también deben tenerse en cuenta ciertos cambios y anomalías cervicales.

Causas del sangrado vaginal después del sexo

La presencia de un sangrado vaginal después de tener relaciones sexuales puede deberse a cualquiera de las siguientes condiciones:

Cáncer (de útero, de cuello uterino): estos cánceres pueden alterar los tejidos vaginales y hacerlos más vulnerables al daño. El sangrado postcoital es un síntoma común de los cánceres de cuello uterino y uterino.

Displasia cervical: ocurre cuando las células precancerosas comienzan a crecer en el revestimiento del canal cervical. Estos crecimientos pueden irritarse y eventualmente dañar los tejidos circundantes, sobre todo durante el sexo.

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Cervicitis: la inflamación del cuello uterino debido al desarrollo de infecciones comunes hace que la mujer sea más propensa a experimentar manchas, sangrado y flujo anormal.

Enfermedad inflamatoria pélvica: se refiere a la inflamación de los órganos reproductivos debido al ascenso de gérmenes infecciosos que no han sido eliminados de forma oportuna. Esta condición suele causar gran incomodidad, inflamación y sangrado vaginal anormal.

Fricción excesiva o lubricación inadecuada: la abrasión durante las relaciones sexuales puede causar pequeños desgarros y cortes en los tejidos genitales sensibles. Se dice que las mujeres que usan anticonceptivos orales son más propensas a estas lesiones.

Hemorragia uterina normal: si estás comenzando tu período, o si este acaba de terminar

Atrofia vaginal: el adelgazamiento, la sequedad y la inflamación de las paredes vaginales causa síntomas muy molestos, como dolor y sangrado durante o después de tener relaciones sexuales.

Sequedad vaginal: cuando están secos, los tejidos mucosos de la vagina son extremadamente vulnerables al daño durante las relaciones sexuales.

Infecciones vaginales o ETS, como la infección por hongos, la clamidia, la gonorrea, entre otras: cualquier tipo de infección puede causar la inflamación de los tejidos vaginales, haciéndolos más vulnerables a las lesiones y al sangrado.

Fibromas y pólipos: estos son pequeños crecimientos no cancerosos que por lo general crecen en el revestimiento del cuello uterino o en el útero. Suelen causar dolor y sangrado anormal durante / después del coito y entre períodos.

Endometriosis: en este caso los tejidos endometriales comienzan a crecer fuera del útero, causando sangrado anormal e inflamación, generalmente en la región pélvica y la parte inferior del abdomen. Es común que las mujeres que padecen de endometriosis noten un sangrado después de sus relaciones sexuales.

Trastornos hemorrágicos: los trastornos que causan hemorragia o coagulación anormal pueden aumentar el riesgo de tener sangrado poscoital. El uso frecuente de medicamentos anticoagulantes también puede tener este efecto.

Ectropión cervical: esto ocurre cuando las células glandulares del interior del canal cervical crecen de forma anormal en la parte externa del cérvix. Esta condición puede desaparecer sin tratamiento, pero suele causar manchado y sangrado vaginal anormal.

¿Cómo puedo saber si mi sangrado después del sexo es algo serio?

Si el sangrado es muy leve, se produce muy de vez en cuando, si ocurre justo antes o después del período o si has tenido un examen negativo de Papanicolau recientemente, es probable que todo esté bien.

Pero si tu sangrado es significativo, constante o se acompaña de otros síntomas vaginales / pélvicos, es muy importante que acudas al médico para ser examinada. En realidad esta es la única forma de saber si un sangrado post-coital es serio o no.

Tengo sangrado después del sexo y ya he pasado la menopausia

Si eres una mujer posmenopáusica, un sangrado vaginal que ocurra después del sexo, o en cualquier otro momento, debe ser evaluado por un médico porque no se considera normal. Acude al especialista para descartar condiciones tan serias como el cáncer de cuello uterino, el cáncer de endometrio, entre otros problemas.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento para el sangrado después del sexo?

El tratamiento de este síntoma depende de su causa. Las opciones comunes incluyen:

  • El uso de lubricantes o humectantes vaginales.
  • El uso de antibióticos para curar infecciones causadas por bacterias, como la gonorrea, la sífilis y la clamidia, así como anti-virales para tratar las infecciones virales.
  • La extirpación quirúrgica, la crioterapia o la electrocauterización para tratar casos de ectropión cervical, pólipos y fibromas, especialmente aquellos que causan una hemorragia importante o son muy grandes.
  • La cirugía o terapia para el cáncer.
  • La terapia vaginal con estrógenos para la sequedad vaginal (cremas, supositorios, anillos)

¿El sangrado después del coito se puede prevenir?

Sí, existen medidas para prevenir varias de las causas que conducen a este síntoma, por ejemplo:

  • Usar un lubricante antes y durante las relaciones sexuales para evitar la fricción o la falta de lubricación.
  • Posponer las relaciones sexuales si estás a punto de menstruar o has menstruado recientemente.
  • Usar el preservativo para evitar el contagio con infecciones de transmisión sexual. Así también evitas el desarrollo de la cervicitis y la inflamación pélvica.
  • Mantener una buena salud vaginal, manteniendo a raya las infecciones comunes (vaginosis bacteriana, candidiasis vaginal)
  • Acudir al ginecólogo cada año para recibir el examen pélvico de rutina. De esa forma se puede diagnosticar cualquier crecimiento o cambio pre-canceroso en el sistema reproductivo.