Flujo vaginal verde durante el embarazo: todo lo que necesitas saber

El embarazo es una de las etapas más maravillosas y emocionantes en la vida de una mujer, pero al mismo tiempo es uno de los períodos más estresantes debido a la gran cantidad de cambios hormonales que implica. Una de las molestias más comunes que las mujeres embarazadas presentan es el flujo vaginal abundante, médicamente conocido como leucorrea. La mayoría de las veces esta descarga es normal e indica que el embarazo va bien.

Pero si la embarazada experimenta un flujo de color verde o amarillento, es posible que tenga una infección que requiere atención médica inmediata a fin de evitar posibles complicaciones. Precisamente en este artículo vamos a estar conversando sobre el flujo vaginal en el embarazo.

¿Qué causa la leucorrea durante el embarazo?

Muchas mujeres se preguntan por qué la cantidad de flujo vaginal aumenta durante el embarazo. Desde un punto de vista hormonal, el estrógeno es la hormona principal que afecta la cantidad de moco expulsado por la vagina, ya sea durante el ciclo menstrual o en el embarazo. Si bien el ciclo menstrual implica un aumento de los niveles de estrógeno cuando llega la ovulación, en el embarazo esto se intensifica. Como resultado, el moco vaginal aumenta tanto que a veces es necesario usar protectores diarios o cambiar la ropa interior varias veces al día para evitar humedecer la ropa o impregnarse con un mal olor.

A medida que avanza el embarazo, la cantidad de descarga también aumenta. Durante la última semana antes del nacimiento, es posible que la mujer tenga una liberación abundante. Se trata de la expulsión del tapón cervical o tapón mucoso en forma de moco vaginal grueso, a veces con vetas de sangre. Téngase en cuenta que si la embarazada comienza a liberar un líquido más similar al agua que al flujo vaginal, se debe llamar a la ambulancia o ir al hospital tan pronto como sea posible; esto puede indicar que ya se ha roto la fuente.

¿Es normal tener flujo verde durante el embarazo?

Un flujo vaginal verde durante el embarazo nunca es bueno, de hecho indica que algo está mal y que el bebé podría verse amenazado. Las secreciones de color amarillento-verdoso se producen como consecuencia de una infección vaginal, por ejemplo la vaginosis bacteriana o la tricomoniasis. Si has participado recientemente en relaciones sexuales sin protección, hay una gran probabilidad de que hayas contraído una enfermedad de transmisión sexual como la gonorrea, la clamidia o el virus del papiloma. Por otra parte, si has utilizado recientemente tampones o protectores diarios perfumados para absorber la descarga excesiva, esto podría haber causado un cambio en la flora bacteriana y alterado el equilibrio entre bacterias buenas y malas.

La mayoría de las veces, la secreción vaginal verdosa se acompaña de picazón, hinchazón, enrojecimiento, así como dolor pélvico, ardor al orinar, dolor durante el coito, manchado, fiebre, entre otros signos. Se puede notar un mal olor procedente de la vagina, así como un flujo de consistencia más espesa en comparación con la leucorrea normal. La cantidad de descarga tiende a aumentar después del sexo y el olor podría llegar a ser significativamente más fuerte.

Si experimentas cualquiera de estos síntomas, te recomendamos visitar al medico en busca de un diagnóstico y el tratamiento seguro para tu embarazo.

¿Qué pasa si el flujo vaginal verde en el embarazo no se debe a una ETS?

Muchas mujeres embarazadas informan la presencia de una secreción verdosa a pesar de no haber tenido relaciones sexuales en los últimos meses. Si este es tu caso, puedes tener vaginosis bacteriana (VB), que es otra causa potencial de las descargas anormales. La VB normalmente se desencadena por una serie de factores como cambios hormonales, el uso de antibióticos, el uso de ciertos productos de higiene femenina, la inserción de objetos extraños dentro de la vagina o el uso regular de duchas vaginales. (Ver: La vaginosis bacteriana durante el embarazo)

¿Qué hacer si tienes flujo vaginal verde en el embarazo?

En lugar de esperar varios días pensando que la secreción anormal va a desaparecer, debes buscar asistencia médica inmediata para identificar y curar la causa subyacente. En el caso de las mujeres embarazadas se debe tener mucho cuidado con este tipo de síntomas, pues las causas asociadas generalmente suponen riesgos para el buen desarrollo del bebé. Ante la duda, lo mejor y más responsable es consultar a tu médico.

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