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FLUJO VAGINAL

¿Cómo saber si tuviste un aborto involuntario?

El aborto involuntario o aborto espontáneo es la pérdida de un embarazo antes de las 20 semanas de gestación, típicamente antes de las 12 semanas. A veces puede ser muy díficil darse cuenta de que se sufrido un aborto, ya que algunos de sus síntomas son similares a los que se presentan durante el embarazo sano. No siempre es fácil identificar la causa que ha provocado el aborto, la mayoría de las veces puede deberse a factores genéticos que impiden la viabilidad del embrión, trastornos hormonales y condiciones de salud de la madre, hábitos insalubres por parte de la madre, su edad o la ocurrencia de un trauma emocional o físico en las primeras semanas del embarazo.

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Muchas lectoras y pacientes embarazadas me preguntan por este tema, ya que se sienten asustadas por la presencia de cierto manchado o sangrado vaginal, y la posibilidad de que este síntoma se asocie con el aborto involuntario. En el artículo de hoy estaremos aclarando algunas de sus dudas más frecuentes, pero de ningún modo intentamos sustituir la valoración médica que puede requerir cada caso en particular. Ante cualquier signo alarmante e inusual en el embarazo, lo mejor es acudir al médico.

¿Cuáles son los signos de un aborto involuntario?

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Si estás embarazada y tienes cualquiera de estos síntomas, comunícate con tu médico de inmediato:

Dolor abdominal. Se trata de un dolor persistente o grave en la espalda baja o la pelvis. Casi siempre el dolor de un aborto involuntario aparece después de, o durante, el sangrado vaginal anormal. La combinación de ambos síntomas en el embarazo constituye una señal de alarma importante. (Te puede interesar: Dolor pélvico en el embarazo)

Hemorragia o sangrado vaginal. La presencia de un sangrado abundante y rojo, o la expulsión de coágulos sanguíneos, es el signo más típico del aborto espontáneo. Aquí aprovecho para aclarar que la presencia de un manchado escaso y marrón en las primeras semanas del embarazo no se corresponde con el aborto involuntario, sino con los cambios hormonales y físicos propios de la gestación. Puede que en algunos casos las manchas indiquen una amenaza de aborto, pero esto generalmente se soluciona tomando las medidas adecuadas; el embarazo llega a término sin problemas. Téngase en cuenta el manchado/sangrado vaginal constante y moderado puede deberse a la implantación inadecuada del óvulo fuera del útero (embarazo ectópico o tubárico); casi siempre aparecen otros síntomas acompañantes graves, como fiebre, dolor pélvico, desmayos.

Expulsión de tejidos. Es posible que además del sangrado aparezcan restos de tejido. En ese caso es recomendable colocarlos en una bolsa de plástico limpia para mostrárselos al médico.

Calambres pélvicos. Algunos casos de aborto involuntario comienzan con la presencia de calambres suaves o muy fuertes, que van y vienen en un corto período de tiempo, o duran varias horas. 

Ausencia de los síntomas del embarazo. Otra señal que puede indicarnos si se ha tenido un aborto es la ausencia temprana de los síntomas del embarazo, por ejemplo la sensibilidad en los senos, las náuseas matutinas, etc.

Diferentes tipos de aborto involuntario

Los abortos involuntarios se clasifican en diferentes tipos, atendiendo a los síntomas ginecológicos que presente la embarazada:

Amenaza de aborto involuntario: la amenaza de aborto involuntario se presenta en forma de manchado/sangrado vaginal durante las primeras 20 semanas de gestación. El cuello uterino está cerrado y hay evidencia de la actividad del corazón del feto. En la mayoría de los casos el embarazo puede desarrollarse sin dificultad.

Aborto involuntario inevitable: el aborto involuntario inevitable se refiere a la presencia de un cuello uterino abierto con sangrado vaginal durante las primeras 20 semanas de embarazo. A veces una amenaza de aborto involuntario puede progresar hasta el aborto involuntario inevitable si se produce la dilatación cervical.

Aborto involuntario incompleto: se produce la salida de una porción del tejido antes de las 20 semanas, pero algunas partes del feto o la placenta permanecen en el útero.

Aborto involuntario completo: un aborto involuntario es completo si el feto, todas las membranas que lo rodean y la placenta son expulsados y el cuello del útero se cierra.

Aborto involuntario perdido: un aborto involuntario perdido es cuando el feto ha muerto o no se ha desarrollado. Sin embargo, ni la placenta ni el feto han sido expulsados del útero.

Aborto involuntario recurrente: se diagnostica en mujeres que han tenido al menos 3 abortos espontáneos y consecutivos.

Además de estos casos, existen otras anomalías del embarazo que generalmente culminan en aborto, por ejemplo el embarazo ectópico (implantación del óvulo fecundado fuera del útero), el embarazo molar (crecimiento de tejido anormal en el útero) y el embarazo embrionario (ocurre la implantación del óvulo pero el desarrollo fetal no tiene lugar)

¿Cómo se diagnostica y se trata un aborto involuntario?

Para saber si la mujer ha sufrido un aborto involuntario el médico suele realizar una prueba de ultrasonido, un examen pélvico y análisis de sangre. La sangre se analiza para determinar los niveles de la hormona del embarazo que aun están presentes y así poder controlar el progreso del aborto involuntario.

Si durante estas pruebas se determina que el útero está vacío, entonces el aborto involuntario ha sido completo y posiblemente no se necesite ningún tratamiento adicional. Si la mujer tiene antecedentes de abortos involuntarios, se deben realizar algunos estudios para evaluar la causa de sus abortos involuntarios recurrentes

Cuando el útero no se vacía completamente se realiza un procedimiento de dilatación y curetaje para retirar cualquier tejido restante. En algunos casos se pueden administrar medicamentos para que el cuerpo expulse el tejido restante como una alternativa a la dilatación y curetaje. Esta opción puede ser ideal para una mujer cuya condición es estable, pero quiere evitar el procedimiento.  

En los casos en que se diagnostica la condición de cuello uterino incompetente (tejido del cuello uterino débil que contribuye o causa nacimientos prematuros y la posible pérdida de un embarazo sano), se puede realizar un procedimiento para cerrar el cuello del útero. 

¿Qué pasa después de un aborto involuntario?

El aborto involuntario suele dejar sentimientos abrumadores de pérdida y dolor. La pareja, y en especial la mujer, necesita tiempo para recuperarse de la tristeza y el dolor físico. Es reconfortante saber que muchas mujeres que han sufrido un aborto involuntario luego han tenido embarazos saludables. Para volver a intentarlo solo debes esperar a que pasen 2-3 ciclos menstruales completos, dando tiempo a que tu cuerpo se recupere totalmente y esté listo para albergar un nuevo embarazo. Algunas mujeres necesitan esperar más tiempo porque aun no se sienten preparadas mentalmente, esto es normal y debe ser respetado por su pareja y familiares más cercanos.  (Ver: ¿Cómo es el primer período menstrual después de un aborto?)

Es importante tener en cuenta que un aborto involuntario no significa necesariamente que tienes problemas de fertilidad. Si has experimentado varios abortos, lo mejor es acudir a un especialista que te realice pruebas de diagnóstico para determinar la causa.

Por último, quiero recordarte que a pesar de los mitos que puedas escuchar al respecto, mantener relaciones sexuales, hacer ejercicio moderado y trabajar fuera de la casa durante el embarazo, no te ponen en mayor riesgo de aborto. Eso no quita que algunas mujeres deban evitar estas actividades debido a alguna enfermedad o porque así lo haya indicado su médico.

Te recomendamos: Qué esperar después de un aborto;   Cólicos en la sexta semana de embarazo;   ¿Puede una infección por hongos dañar el embarazo?;   ¿Es normal que la vagina duela mientras se está embarazada?;   ¿Por qué tengo la línea negra sin estar embarazada?

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